En la oración que nadie nos leyó descansa el tiempo sin final en retazos de recuerdos sin color. Y aún hoy nadie escribió las voces pasadas de aquellas mañanas que el sentido nos arrancó... Y el sol secó la angustia que gritó la lluvia amarga en la mañana... sin vos. Y el mar se ahogó sin ver salir el sol, sin abrazarlo, sin contarle lo que hizo hoy. Sólo pudo extrañar su calor... Y acá me ves, temiendo ser quién soy,
Y el sol secó la angustia que gritó
deseando que hayas visto al hombre que no puedo ser sin vos!
Si mi amor sin condición pensó que alcanzaba...
por qué esa mañana todo lo que era se derrumbó?!
la lluvia amarga en la mañana... sin vos! Y el mar se ahogó sin ver salir el sol, sin abrazarlo, sin contarle lo que hizo hoy. Sólo puedo extrañar tu calor... En las mañanas que soy hijo y vos sos vos, te extraño tanto hoy... Suelo soñar y recordar al chico que creció y perdió su sol. Sos vos, la luz y el calor que brilla y quema en lo que soy! Y el sol secó la angustia que gritó cuan enojado y asustado sigo sin vos! Mi fe murió en todo lo que soy, quiero abrazarte y contarte lo que hice hoy y sentir de nuevo tu calor...
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